Compromiso con la Agenda 2030 y los ODS


El año 2015 la Asamblea General de las Naciones Unidas aprobó la llamada Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible, un ambicioso plan universal que pretende hacer realidad los derechos humanos de todas las personas. Se concreta mediante un sistema de 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), que reflejan directa o indirectamente las normas de derechos humanos centrándose en tres ejes (el económico, el social y el ambiental), y que a su vez se definen en 169 metas a lograr.

La Agenda 2030 y los derechos humanos están interconectados y estrechamente unidos. Por ejemplo, varios objetivos ponen el foco en áreas importantes de los Derechos económicos, sociales y culturales, como la pobreza (Objetivo 1), la alimentación y la nutrición (Objetivo 2), la salud (Objetivo 3), la educación (Objetivo 4), el agua y el saneamiento (Objetivo 6). La no discriminación se ve reflejada mediante la igualdad de género (Objetivo 5). La inclusión social y la igualdad de derechos y oportunidades (Objetivo 10). El derecho a la vivienda, en los espacios inclusivos y la calidad de vida en las ciudades (Objetivo 11). Por otro lado, los objetivos para el medio ambiente, el cambio climático y los recursos naturales (Objetivos 12, 13, 14 y 15) también están relacionados con el goce de los derechos humanos.

Finalmente, los ODS incluyen un objetivo sobre instituciones responsables e inclusivas y el acceso a la justicia para todos (Objetivo 16), el cual se relaciona con normas y principios importantes de los derechos humanos (incluye metas relacionadas con el acceso a la información y la protección de las libertades fundamentales, la participación en la toma de decisiones, y las leyes y políticas no discriminatorias).

Esto es especialmente pertinente. Si bien la Agenda 2030 no es un instrumento jurídicamente vinculante, las convenciones y los pactos internacionales de derechos humanos sí lo son, siendo estos uno de los principales marcos que fundamenta la actuación de la Sindicatura.


El éxito de la Agenda 2030 exige un sistema de gobernanza multinivel que vincula, entre otros, al gobierno local, entendido como agente responsable, pero a la vez establece la necesidad de generar una red de alianzas para impulsar, implementar y conseguir los hitos marcados. Por lo tanto, la Sindicatura de Greuges de Barcelona, como institución garante de los Derechos Fundamentales y las Libertades públicas en la ciudad, cobra un papel importante como instrumento que impulsa, mediante sus actuaciones y recomendaciones, el cumplimiento de los objetivos marcados por la agenda 2030.